Escribir es una actividad que para muchos resulta un tanto misteriosa. Lo cierto es que hay ciertas formas en las que los escritores son a menudo representados que creemos que así es la vida de un escritor realmente. Con escritores me refiero a cualquiera que esté trabajando en algo, sin necesariamente ser un autor publicado.
Ahora veamos algunos de los mitos comunes acerca de los escritores.
Somos tan especiales, que nuestros libros se vuelven bestsellers
Es mejor que hablemos de esto lo más pronto posible. Definitivamente es algo increíble cuando un libro alcanza el nivel de ‘más vendido’, pero no es el caso con todos; ni siquiera la mayoría. Por algo es un logro tan aclamado, no es algo que le pasa a todo el mundo.
Muchos nos involucramos en el mundo de la escritura y empezamos a perseguir seriamente la meta de publicar, pero nos dejamos llevar por promesas de riqueza y fama. Nuestro trabajo merece ser remunerado, por supuesto. No es cuestión de ser pesimistas tampoco y no considerarnos suficientes. Siempre debemos apuntar al éxito, pero siendo conscientes que lo más importante no es superar a otros, sino superarnos a nosotros mismos, hacer un buen trabajo y aportar algo al mundo.
Si nos dedicamos a esto, moriremos de hambre
También está el otro extremo. Escribir libros sí conlleva un poco más de riesgo financiero que otras actividades, pero no es para tanto. Es como vender cualquier otra cosa. Creas un producto, lo promocionas, lo vendes. Y si no lo promocionas lo suficiente, y si no es de buena calidad, entonces no se vende. Todo depende de la gestión realizada.
En otra época, los escritores dependían sólo de las editoriales para que sus libros salieran a la luz. Por ello quizá podían pasar años y años antes que pudieran vender un libro. Pero ya no es así. Hoy en día existen muchas opciones. Pero las mismas condiciones aplican. Al fin y al cabo, los libros son productos. La única diferencia es que son profundamente personales para el creador. Afortunadamente, esto significa que estamos aún más interesados en que el mundo los vea y los ame tanto como nosotros.
Si eres un escritor es porque tienes talento
La creencia que tenemos un don innato para escribir siempre me ha parecido linda, pero no muy verdadera. A todos nos gusta pensar que somos especiales, hay que admitirlo. Pero en realidad, no se trata de un superpoder.
Podemos hablar de tener imaginación, tener el deseo de comunicar algo que el mundo debe saber, tener un amor por los libros… La motivación para escribir viene de muchas fuentes diferentes, así como la habilidad para escribir. Construir una historia es tanto un arte como una ciencia. He leído cientos de libros para las reseñas que hago, y aunque no hay una formula del éxito, sí hay cosas que por lógica, las buenas historias tienen.
Personajes bien desarrollados con un claro camino en su historia, ambientes que deslumbran y que sitúan an lector firmemente en la historia, un conflicto que tiene sentido y resuena con los lectores, y temas que amarran todos los otros elementos para contar algo que vale la pena.
Escribir es una actividad de glamour
Escribir es duro. A veces puede ser horrible incluso. Solemos romantizar las cosas y hacer que se vea bello, y de mucho sacrificio y como si las historias excelentes salen de una sola noche en vela.
Puede ser que sea así para algunos, pero no es la regla.
Es por esto que el talento no es suficiente. No es suficiente sólo saber cómo contar una historia, sino que te importe tanto que estás dispuesto a no trabajar en ella semanas, sino incluso años para que sea lo mejor que puede ser.
Los escritores no tienen vida
Oh, bueno. Esto sí es un poco cierto para algunos. Pero sólo porque muchos somos introvertidos y honestamente las personas nos abruman.
Aún así, experimentar y salir allá afuera es muy importante para nosotros. No importa que tan de fantasía o ciencia ficción puedan ser nuestras historias, siempre van a haber varios elementos conectándolas con la realidad. Y son justamente nuestras experiencias y opiniones las que alimentan esa realidad que mostramos a nuestros lectores. Mientras más vivimos, más tenemos qué contar, y de formas más interesantes.
[divider]
Leave a Reply