Luego de ser lector por un tiempo, a muchos nos pasa que queremos hacer lo mismo. También queremos crear mundos, trazar caminos, y darle vida a personajes; mediante los cuales impactaremos en otros lectores. Nos comenzamos a preguntar cómo escribir una novela.
Quizá ya incluso te has lanzado a intentarlo. Es una experiencia profundamente terapéutica, esclarecedora, y un ejercicio muy vulnerable. Expone nuestras dudas, y desafía nuestra disciplina. En resumen: no es un trabajo fácil.
¿Cómo se comienza una historia?, ¿cómo la organizas?, ¿qué personajes utilizas?, ¿qué deberían hacer? Una tras otra vienen las interrogantes una vez que la emoción inicial se va convirtiendo en pánico, y tristemente, luego en parálisis.
Quiero que escribas tu historia, y que el no tener la información técnica que necesitas no evite que lo logres. Escribir es en gran parte creativad, imaginación, arte. Pero también es estrategia, disciplina, y técnica.
Esta guía tiene como objetivo ofrecerte lo que sé sobre la técnica de construir una historia.
Mi proceso de escritura lo resumo en 3 pasos:
- Organizar las ideas y crear la premisa de mi historia
- Desarrollar la premisa y formar una estructura
- Usar la estructura como guia y comenzar a redactar
Organiza tus ideas y forma una premisa
Comenzamos siempre con una idea. Pero una idea no es una historia. Necesita ser desarrollada un poco más para saber realmente qué es lo que tenemos. Una historia aparece luego de jugar con varias ideas, luego de enlazarlas, encajarlas, darles forma.
Me gusta asemejarlo al proceso de armar un rompecabezas. Tienes una imagen del resultado final, pero al principio lo que tienes es 1000 piezas tan pequeñas que no estás seguro ni de por dónde comenzar.
Una idea no es una historia Share on XUna idea no es mas que sólo una de estas piezas del gran rompecabezas que es tu historia. Y como en un rompecabezas, lo primero que hacemos es examinar las piezas y agruparlas. A veces podemos identificar varias que parecen pertenecer a la misma área porque tienen colores similares. Sabemos que luego podrían ir ubicadas juntas pero aún no estamos seguros de cómo irán enlazadas.
Así mismo sucede con nuestras ideas para una historia. Quizá tenemos el concepto de un personaje, o hemos imaginado una parte del conflicto que nos emociona escribir. Eso está genial. Pero para tener una visión clara de lo que pretendes con tu historia, debes tener una premisa.
La premisa de tu novela es un enunciado que la describe de forma concisa, pero completa.
Idea: Una competencia violenta organizada por un gobierno dictador.
Premisa: Katniss, una adolescente del Distrito 12, tiene que sobrevivir a una competencia violenta organizada por un gobierno dictador, cuando eligen a su hermana pequeña pero ella se ofrece como voluntaria en su lugar.
La diferencia entre una idea, y una premisa, es que la premisa junta los 4 elementos de una historia: Personaje, espacio, conflicto, y tema.
Estos son las 4 categorías en las que agruparemos las ideas que tengamos.
El personaje
No existe una receta única de atributos que resulten en un personaje perfecto. Pero por suerte, no queremos personajes perfectos. Queremos personajes memorables, que no podamos olvidar.
Existen muchos recursos disponibles para crear y desarrollar personajes. Una práctica común es realizar fichas de personajes o character sheets. Estos documentos vienen en forma de cuestionarios, o formularios que tienen como objetivo descubrir la mayor cantidad de datos posibles sobre un determinado personaje.
Antes de hacer una ficha así, te recomiendo que averigues 3 cosas sobre tu personaje, las que verdaderamente te ayudarán a contar su historia:
- La Mentira que el personaje cree o debe desafiar.
- Lo que que el personaje quiere.
- La Verdad que el personaje debe encontrar o defender.
Evita cometer errores como usar más personajes de los que necesitas, o subestimar la importancia de tu antagonista.
El espacio
A menos que tu historia sea de fantasía, ciencia ficción, o de alguna forma no esté situada en el espacio/tiempo que conocemos, los escritores suelen omitir pensar en el espacio.
El espacio es mucho más que sólo worldbuilding o construcción de mundos. Se refiere a contexto, que es un concepto aplicable a cualquier tipo de historia.
El contexto de un personaje incluye dónde vive, pero también cómo vive. Todo esto forma lo que llamamos su Mundo Normal, su rutina, aquello que le es conocido. Tienes que descubrir y establecer el mundo normal de tu protagonista porque de esa forma también le das al lector información sobre el personaje en sí.
Durante todo el Primer Acto de tu historia, los eventos probablemente tendrán lugar en este mundo normal. Cuando el personaje se involucre en el conflicto, pasa a algo que se denomina el Mundo de Aventura. El mundo de aventura en cambio va a representar la antitesis de aquello a lo que el personaje está acostumbrado.
El mundo de aventura debe desafiar la rutina del personaje, forzarlo a tomar decisiones difíciles, castigarlo incluso en algunas ocasiones.
Por ello es que el espacio no siempre es sólo un espacio fisíco, sino una serie de características que construyen el ecosistema en el que se mueve el personaje.
El espacio en una historia incluye una serie de características que construyen el ecosistema del personaje. Share on XEl conflicto
El conflicto nace de aquello que se interponga en el camino del personaje en su afán de cumplir sus metas. Por eso es tan importante que el personaje tenga motivaciones muy fuertes. Lo suficientemente fuertes para llevarlo a dejar su zona de comfort y así comenzar la historia.
Pregúntate:
- ¿Qué es lo que mi personaje quiere lograr en la historia?
- ¿Por qué?
- ¿Qué evento, ya sea por interferencia externa, o por una decisión del personaje, se opondrá directamente a esta meta?
El tema
El autor tiene una intención cuando escribe algo, y los lectores pueden interpretarlo de muchas maneras. Pero es importante que quien escriba siempre tenga en mente lo que quiere comunicar. Okay, hay una pelea entre dos reinos, pero ¿qué es lo que hay detrás de todo eso? ¿Las guerras no tienen sentido? ¿Los humanos están destinados a la violencia? ¿Hay que luchar por lo que uno cree?
Estos son los temas que surgen orgánicamente de una historia. Nunca puede ser forzado. Pero sí pensado.
Recuerda que no se trata de dar una ‘lección’. Los mejores libros no son los que tratan de persuadir a las personas a ver las cosas de una manera, sino los que muestran diferentes perspectivas, lo bueno y lo malo de cada una, y te hacen pensar.
Planifica y estructura tu historia
Ahora, lo que menos les gusta a muchos. Pero antes de que te saltes esta parte, te prometo que vale la pena planear antes de escribir. Como ya mencioné, terminamos planeando de una forma u otra. La diferencia es si haces toda la parte ‘aburrida’ antes, o terminas cortándote la inspiración en medio de la redacción. Si no defines unas cuantas cosas antes de comenzar, lo más probable es que te encuentres con esos vacíos luego, y tendrás que detenerte y pensar en ello antes de continuar. Y sí, a veces pasa igual aunque te hayas preparado, ¡pero las crisis son menos!
Con una planeación:
- Sabes cómo manejar las emociones de tus lectores en cada parte
- Podrás identificar donde debes hacer correcciones
- No habrán tantos estancamientos luego
- Tienes una mejor idea de tu mensaje
- ¡Menos estrés!
Lo mejor es que hay muchas maneras de hacer tu outline, estructura, o escaleta. Puedes ser tan general o detallista como desees. Lo más importante es que sea un sistema que funcione para ti. Porque nadie más va a ver esto. Sólo tú.
A mí, por ejemplo me gusta primero definir los detalles generales, luego las escenas claves de mi historia, y luego rellenar un poco para tener una idea de qué va entre esos puntos. Así tengo una planeación, pero no tan estricta que no hay espacio para desviarme un poco.
La estructura de los 3 Actos
Dividir una historia en 3 Actos es una práctica que proviene del mundo teatral, y se sigue aplicando. Porque funciona. Hablando de crear una planificación que te guíe pero al mismo tiempo te de suficiente libertad, usar 3 Actos en tu outline es la manera que te recomiendo, y la que uso en todas mis historias.
Y recuerda: conoce el final
Esto sí es algo de lo que no te puedes zafar. Si no sabes el final de tu historia, terminarla será el triple de complicado. Porque todo lo que va al principio depende de lo que irá luego. Así que si inicias, y vas escribiendo sobre la marcha, cuando llegues al final, 1) probablemente te estancarás, y 2) cuando lo escribas, tendrás que regresar a cambiar muchas cosas.
¡Conoce el final de tu historia!
Decisiones previas
Hay algunas consideraciones que debes hacer antes de escribir. No lo agregué en la planeación porque es algo que quería mencionar aparte. Esta es una sección corta.
Narrador
Algunas personas me comentan que tienen mucha confusión en cuanto a qué tipo de narrador usar. El tipo de narrador que decidimos usar, sea primera o tercera persona, o la que sea, va afectar no sólo el tono de la historia, sino también la información, y la experiencia que recibe el lector. Tengo un artículo separado que va súper en detalle sobre qué narrador escoger.
Extensión
¿Cuántas páginas debe tener? Ésa es la pregunta del siglo. Pero luego de investigar un poco te darás cuenta que nos manejamos con palabras en lugar de páginas. Es más exacto.
Para las novelas tenemos extensiones desde 50000 hasta incluso 200000 palabras. Es un rango… extenso. Pero dentro de este rango, las extensiones varían según el género. Novelas de fantasía y ciencia ficción requieren más palabras. En estos géneros apuntas a entre 80000 a 110000.
Comienza a redactar tu historia
Ahora, hay un proceso de escritura, que comienza con la idea, pero dentro de la redacción misma, tu historia pasa por algunas fases.
- Outline
- Primer borrador
- Segundo borrador
- X número de borrador
- Versión final
Tu primer paso en la redacción es de hecho tener lista tu planeación. Puede que sea sólo una hoja con tus escenas principales, o un cuaderno completo lleno de apuntes. Lo que funcione para ti.
Cuando tengas lo que necesites, comienzas a escribir. Escribes y no piensas mucho porque ya tienes tu apoyo en tu preparación. El objetivo del primer borrador es sólo terminar la historia. Así puedes verla completa y saber dónde debes trabajar más. Y allí comienza el trabajo más pesado. ¡Reescribir y reescribir hasta que esté lo más pulida posible!
Lo más importante: Comienza
Haz un compromiso contigo mismo y comienza a desarrollar esa idea, retoma esa historia y planea donde te quedaste, o desempolva ese documento y continúa. Eso es lo más importante.
Si estás súper inspirado ahora y quieres un poco de ayuda para empezar, puedes inscribirte a un curso (¡gratis!) sobre cómo desarrollar tu idea con tus personajes, espacio, conflicto y tema.
alfonso Tirado says
Hola Pamela. Tu sistema está muy bien estructurado. Será de gran utilidad para los aspirantes a escribir y aún para los que han principiado a trabajar y que se topan con lops obstáculos naturales. Les pondrá en el camino y después cada quién encontrará el proceso que más le conviene.
Miguel Castro says
Gracias, es una guia muy concreta y orientadora, facil de seguir y muy comprensible.
Alejandra says
Me gustó mucho este contenido. Muy conciso.
Lo mejor de todo es que planteas una metodología de trabajo.
Carla says
Mil gracias por una explicación tan extraordinaria sobre cómo comenzar. Estoy siguiendo tus pasos y me está encantando la experiencia. Siempre he tenido ideas sobre las que escribir, pero nunca me he organizado lo suficiente como para estructurarlas a modo de novela. En cuanto tenga algo más de tiempo, me apunto a tu curso!