Desde 2014 que se creó este blog, le he invertido (con ayuda de mis padres al principio) aproximadamente unos $3.000. Incluyendo la renovación de hosting y dominio cada año, plantillas y plugins que he comprado, recursos gráficos, y software de email marketing que por un tiempo también invertí (ahora me encuentro usando la versión gratis del servicio).
Puede parecer poco o mucho según cómo lo quieras ver. Pero a ojos de mi padre, e incluso los míos de vez en cuando, todo esto de los libros, el blog, el bookstagram: Es un hobby caro. Y ya.
No llegué a monetizarlo como hubiera querido, o al menos para justificarle a mi papá que sirvió para algo. Cuando ya no necesité tanto su ayuda, me dijo ‘¿Y tú vas a seguir pagando eso? Deberías ahorrarlo, hacer otra cosa.‘ No está totaaalmente equivocado, entiendo por qué lo dice.
Pero, ¿cómo puedo hacer eso si este blog fue el que catalizó que yo hoy tenga un sueldo que me ayuda a mantener dicho blog aún vivo?
Un mes después de conseguir mi primer trabajo también escribí un blog sobre esto (que recién encuentro y me acuerdo que existía), pero ahora estamos hablando de casi 6 años, y 5 empresas después. Tengo una perspectiva -no diferente, pero sí más amplia sobre el impacto de mis hobbies en mi carrera.
Cómo me interesé en el marketing digital
Para cuando terminé mi carrera de Negocios Internacionales, sabía que quería de alguna forma entrar al mundo del marketing digital. En 2014, cuando creé el blog, lo hice mas bien por mis planes de ser escritora, y obvio el urge de compartir lo que estaba leyendo en algún espacio. No tenía idea que el mundo de redes sociales y marketing digital era una carrera viable.
Pero, durante esos 4 años me metí tanto en lo del blog, que terminé yendo mucho más allá que solo escribir entradas y publicarlas.
Veía blogs de otras lectoras, y muchas compartían también consejos que podrían ser de branding y marketing digital. Como todo eso era nuevo para mí, leía todo lo que podía. Luego encontraba a otras personas que hablaban específicamente de esos temas fuera de la esfera del mundo literario.
Así fue como aprendí conceptos y buenas prácticas de marketing digital y descubrí todo ese potencial.
Sin querer, mediante el blog aprendí sobre:
- Crear contenido en formato de artículos, con estructura de títulos h2, h3, y títulos de artículos que enganchen
- Manejo de calendario editorial
- Creación de sitios web en WordPress (hosting, dominios, configuración)
- Instalación de plantillas de diseño y plugins
- Creación de gráficos con herramientas de diseño como Canva
- Arquitectura de información
- Métricas y análisis
- SEO
- Modificación de plantillas con código CSS o metiéndome en los archivos PHP y sudando frío para no destruir el sitio
- Email marketing y configuración de automations
- Copywriting para conversión de suscriptores
- La función de los lead magnets como herramientas de marketing digital

El blog como mi único portafolio para mi primer trabajo en una agencia
Armada con una carrera en negocios, una pasantía de recursos humanos, y un hobby caro, empecé a aplicar a trabajos en agencias de publicidad.
Hice mi research y mandé correos aunque no estuvieran contratando (la mayoría no lo estaba). Simplemente me presentaba en el correo, mencionaba el tipo de cargo que me interesaba (Community Manager), y adjuntaba mi CV.
La mayoría nunca respondió. Pero poco después, una lo hizo, me mandó el mismo día un par de preguntas de prueba, y me citó a una entrevista por la tarde. Dio la casualidad de que les había escrito yo y justo ellos sí tenían una vacante y estaban en un proceso de selección.
Mi jefe era una persona muy fan y conocedora del marketing digital, especialmente la analítica, el e-commerce, los anuncios digitales.
Me preguntó por lo que había puesto en mi CV. Yo había escrito que me interesaba el marketing digital y que estaba familiarizada con varios conceptos. Me pidió que le enseñe mi blog y le cuente un poco sobre mi proyecto. Así que volteó la pantalla de su compu hacia mí, y le fui hablando de ello. Le conté lo que sabía y de ahí surgió la conversación.
Le conté casi que todo lo que mencioné en la intro. No tan elocuentemente, pero hice mi mayor esfuerzo. Esta era mi PASIÓN, y creo que eso se notó full.

Cuando escribí el artículo de 2019 sobre cómo el blog me había ayudado, llevaba 1 semana en el puesto.
Ahora tengo 2 cosas muy en claro:
- Sin mi blog de reseñas de libros juveniles, la entrevista hubiera sido mucho más corta. ¿Me hubiera contratado? Quizá sí. Y hubiera aprendido lo que tenía que aprender. Pero en lo posterior, no hubiera tenido los skills listos para proponer muchas cosas que propuse, en el momento en que lo hice.
- Una de mis compañeras que estuvo en parte de mi entrevista porque ella sería mi ejecutiva, meses después me comentó que el hecho de que tuviera el blog, la cuenta de libros aesthetic y que lo hubiera presentado tan lindo sí les gustó mucho. No me dijo que haya sido la razón por la que me contrataron, pero sí que los terminó de convencer. ¡Me doy por bien servida!
Skills de bloguera + el resto de mi carrera
Conseguir mi primer trabajo en marketing digital fue solo una, y la primera de las veces en las que mi blog literario me resultó útil en mi carrera.
Crecí a social media manager gracias a skills de branding y estrategia
Como había investigado full sobre el proceso de creación de una marca, qué debo saber, cómo sé cómo hablar, étc, en ése primer trabajo empecé a incorporar esas cosas en las estrategias para clientes, haciéndolas pesar más. Lo convertimos en el estándar y pasé a tener un rol más activo en la parte estratégica.
Siempre tuve que arreglármelas para hacer gráficos para mi blog o buscar respuestas y soluciones a problemas. En mi trabajo también fui bastante recursiva y encontraba herramientas que nos podían ayudar. No implementábamos todas, pero igual apreciaban la proactividad.
Asumí cargos de copywriter y web project manager gracias a mis nociones de desarrollo web
Con años manejando mi propio sitio web, conociendo el proceso de creación, cómo funciona WordPress, cómo se sube un artículo, cómo se editan páginas, cómo puedo entrar y cambiar cosas del diseño, tan pequeñas como cambiar el tamaño de letra; pude explorar el rol de project manager.
No era ninguna experta, como un desarrollador web. Pero mi jefe de ese tiempo encontró muy valioso que pudiera comunicarme bien con el desarrollador, pero poder explicárselo a un cliente ‘con peras y manzanas’, y viceversa. Cuando conversaba con un cliente y me pedía algo, podía tener una idea de lo que iba a representar para un desarrollador, o al menos sabía qué preguntas hacer.
Hice un shift en mi carrera a UX writer gracias a la combinación de experiencias laborales y mi proyecto de Reverie Society
Y aquí estamos hoy. Este año hice un major shift, del mundo de las redes sociales, al mundo web de nuevo. Hoy, mi trabajo me demanda saber redactar blogs, pero también cómo mejorar la experiencia de una persona dentro de uno.
En mi entrevista me preguntaron cómo había sido mi proceso antes de trabajar con equipos multidisciplinarios, cómo redacto blogs, cómo aplico nociones de SEO en mi trabajo.
Y, you guessed it, no sabría ni hubiera experimentado nada de eso sin este pequeño blog de libros que nunca llegué a ‘monetizar’, y en el que perdí mucho tiempo cuidadosamente manteniendo, cambiando con mucho cariño los colores y gráficos, y volcando mis pensamientos sobre libros de romance y fantasía💖.
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